Paelles d'Ador 2014. #DíasParaRecordar

Estos días son los típicos en que inevitablemente empieza mi cuenta atrás hacia la rutina y mi cuenta de las últimas veces en que hago cosas (dentro de esta especie de rutina veraniega que me he creado). También suelo recapitular y pensar en cómo han sido estos meses para mí. La verdad es que me siento muy afortunada por tener a quien tengo a mi alrededor y por poder disfrutar de un verano sin preocupaciones y aprendiendo a vivir.

Ya que hoy no estoy muy elocuente, dejaré algunas fotos del día de las Paellas de Ador. A este gran día le acompañan tardes y noches por la playa de Gandía (y en el McDonald's, ejem), por Daimúz, en la piscina, en fiestas de pueblos, en conciertos... Ayer asistí a una manifestación para intentar salvar la playa del Auir. Era curioso ver el contraste entre los manifestantes y los turistas (desde familias a despedidas de solteros...). Ojalá mucha más gente se vaya uniendo a la causa. La problemática de la playa del Auir se merece una entrada entera, explicándolo todo y con fotografías donde se aprecie la belleza de esa zona. Sin embargo, como he dicho, no estoy muy elocuente.

Como ya he mencionado, estas fotografías pertenecen a las Paellas de Ador. La mayoría son de la fiesta de disfraces de la tarde. A pesar de que mi grupo de amigos y yo llevamos yendo tres años, nunca nos habíamos podido disfrazar. Después de algunas discusiones decidimos disfrazarnos de Charles Chaplin (Charlot), uno de los iconos del cine mudo y el humor. En fin, no es que fuéramos especialmente guapos pero creo que hacíamos un buen grupo.

Recuerdo una anécdota mientras paseábamos con los disfraces. Un niño de unos once años (o menos, calculo fatal las edades...) disfrazado de bebé se me acerca y me pregunta de qué vamos vestidos. La verdad es que desde hace años pienso que no sé tratar a los niños porque no sé cómo explicarles las cosas, si hablarles como hablo yo normalmente, de manera distinta... Total, le contesto que íbamos de Charles Chaplin y suponiendo (suponiendo bien, por cierto) que no sabía quién era (y encantadísima por poder hablar de un personaje tan importante para el cine), le doy varios datos. Me paso un buen rato explicándole quién fue y qué hizo (Realmente, creo que me motivé mucho). El niño me mira con unos ojos gigantescos y claros y, por un momento, pienso que estoy explicándome de lujo porque por su gesto parece que me va siguiendo.

-Sí, sí, ja sé de qui parles... ("Sí, sí, ya sé de quién hablas").

Dentro de mí: "Mar, ¡conseguido! Si es que los niños no son tan complicados..." *Emoticono de las gafas de sol de Whatsapp* 😎

-Eixe ix en Clan TV, veritat? ("Ese sale en Clan TV, ¿verdad?)

Yo: Ay, señor... 😰

-Sí, això ho veu la meua germana menuda. Són uns que no parlen, a que sí? ("Sí, eso lo ve mi hermana pequeña. Son unos que no hablan, ¿a que sí?")

Mierda. Tocada y hundida. 😅  Asiento con la cabeza y el niño satisfecho y convencido se va corriendo hacia un camión que lanza caramelos.
















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